Desde Manaos, por Cynthia García Calvo El Teatro Amazonas de Manaos, inaugurado en 1896 para evidenciar la opulencia de la por entonces “París de los trópicos” en plena fiebre del caucho, y que quedó inmortalizada en la pantalla grande en “Fitzcarraldo” de Werner Herzog, es por estos días el imponente centro neurálgico del octavo Amazonas Film Festival, que dio inicio este jueves con el estreno mundial de “Xingu”, la nueva producción de Fernando Meirelles.
La ovación que coronó la exhibición de “Xingu” demostró que este lugar era sin duda el más adecuado para su primera presentación pública, por abordar un tema que toca de cerca a los locales. Bajo dirección de Cao Hamburger (“O ano em que meus pais saíram de férias”), la película es un drama con aliento épico basado en hechos reales que invita a la reflexión. El relato se centra en la odisea de los hermanos Villas-Bôas, quienes tras hacer contacto con tribus indígenas luchan por la creación de un área para su preservación, que dio como resultado el Parque Nacional do Xingu.
“Además de querer rescatar la historia de los Villas-Bôas, que es imposible contar en una sola película, nos motivó la importancia que este film puede tener hoy en Brasil, en un momento donde estamos eligiendo qué tipo de progreso queremos para nuestro país”, explicó Hamburger acerca de una historia que se desarrolla décadas atrás, pero que se mantiene tristemente vigente por la actual amenaza que sufren grupos indígenas, ante la construcción de la central hidroeléctrica Belo Monte en el río Xingu.
El proyecto nació cuando el hijo de uno de los Villas-Bôas tocó a la puerta de Meirelles para pedirle que cuente la historia de su padre y hermanos. Su insistencia hizo que finalmente el director de “Ciudad de Dios” leyera un libro sobre la historia de ellos y rápidamente entendió que allí había una película.
Por falta de tiempo, aún con el deseo de dirigirla, Meirelles invitó a Hamburger a asumir la realización, marcando su interés por abordar una historia auténticamente brasileña. “Cuando Fernando me mostró el proyecto, lo primero que me dijo es que era una historia brasileña sobre brasileños. Ya había un concepto y una idea de por qué hacer el film. Las historias brasileñas son olvidadas porque la gente no les da valor o tal vez no entienden como contarlas. Pero esta es una prueba de que hay buenas historias brasileñas para contar”, sostuvo el realizador.
“Xingu” –apenas finalizada la semana pasada- es una superproducción de 15 millones de reales, desarrollada por O2 Filmes, la productora de Meirelles, que cuenta con la coproducción de Globo Filmes. Como parte del acuerdo con la emisora, el material rodado servirá también para la realización de una miniserie de cuatro capítulos.
El film se exhibe en este marco como paso previo al inicio de su camino por festivales extranjeros, que esperan poder comenzar en Berlín el próximo año.
Con la exhibición de “Xingu” se abrió el juego en este Amazonas Film Festival, que exhibirá 33 películas de 10 países en sus tres competencias oficiales: Largometrajes, Cortometrajes brasileños y Cortometrajes amazonenses. En esta edición además se añade la realización del Iberoamerican Film Crossing Borders, el seminario para proyectos latinoamericanos en desarrollo.