Las películas sobre procesos de maduración, lo que en inglés se denomina con el conciso y descriptivo coming of age films, parece haberse convertido en el tema favorito del cine latinoamericano; al menos es el tema que dominó la competencia oficial de ficción del 54° Festival Internacional de Cine de Cartagena de Indias, en la cual más de la mitad de las producciones se centraron en esa etapa de crecimiento.
La argentina Celina Murga es una de las realizadoras que viene indagando en ese terreno a lo largo de su cinematografía. Habiendo examinado a los adolescentes en la burbuja de un country en “Una semana solos” y al mundo escolar en “Escuela normal”, en su nuevo largometraje “La tercera orilla” retoma el tema para indagar también en la idea de masculinidad en una sociedad patriarcal.
“Es una edad que yo encuentro muy rica porque es naturalmente una edad de mucho conflicto, donde hay una pulsión por formarse como individuo”, explica Murga sobre su interés por centrarse en esa etapa bisagra. “Lo que yo intento trabajar, a través de estos adolescentes, es este mundo adulto que los rodea y que les impone sus reglas. Me interesa reflexionar sobre cómo nosotros los adultos estamos pensando un mundo en relación a estos jóvenes que son el futuro de todos nosotros”, detalla.
Las dos producciones mexicanas en competencia coincidieron en mostrar diferentes perfiles de adolescentes. Fernando Eimbcke, quien ya en su ópera prima “Temporada de patos” trataba el tema, aborda el despertar sexual en “Club sandwich”; mientras Samuel Kishi fusiona iniciación, sueños y rock en “Somos Mari Pepa”.
“Creo que la adolescencia es un periodo interesante porque la mayoría de las personas pasa por situaciones y experiencias parecidas en esa época”, dice Daniel Ribeiro, director y guionista de “Hoje eu quero voltar sozinho”, que llegó a Cartagena habiendo obtenido el premio Teddy y el premio FIPRESCI en la Berlinale 2014. Su film es un retrato cándido de la adolescencia, centrándose en un primer amor, y observando a una generación donde la elección sexual no representa un tabú.
“La experiencia del primer amor, el primer beso, los primeros descubrimientos, son temas universales independientemente de la cultura o la sexualidad”, concluye, lo cual de alguna manera explica la forma en que el público conecta con el film.
Identidad es otro de los temas que afloran dentro de estos coming of age films, con ejemplos como la argentina “Ciencias naturales” de Matías Lucchesi, la chilena “Raíz” de Matías Rojas Valencia y la venezolana “Pelo malo” de Mariana Rondón, que siguen a pre-adolescentes en búsqueda de sí mismos.
La producción nacional también hizo su aporte con “Mateo”, la ópera prima de María Gamboa, que vuelve sobre el tema del conflicto armado, pero ahora como trasfondo de la historia de un joven que descubre el arte como vía de escape de un entorno nocivo.
Desde Cartagena de Indias, por Cynthia García Calvo.