Los productores: Fernando Sokolowicz, director de Aleph Media y productor de “El ciudadano ilustre”
“El ciudadano ilustre” de los argentinos Gastón Duprat y Mariano Cohn cerró con la entrega de los Premios Platino un año colmado de éxito al llevarse cinco importantes galardones. Andrés Duprat fue elegido mejor guionista, Oscar Martínez mejor actor tanto por el público como por los miembros del jurado, y también espectadores y jurado coincidieron en que la película fue la mejor del cine iberoamericano de 2016. Su productor, Fernando Sokolowicz, también ganó el Premio AMA, entregado por la Asociación Madrileña Audiovisual en el marco del foro de proyectos del VI Foro EGEDA-FIPCA, por el largometraje “Bestseller” de Carlos Sorín. LatAm cinema dialogó con Sokolowicz sobre su forma de trabajar y los próximos proyectos de su productora, Aleph Media, con la que ha producido más de medio centenar de largometrajes, entre los que se encuentran desde clásicos del cine argentino como “El lado oscuro del corazón” hasta películas más recientes como “El hombre de al lado”, “Viudas” o el blockbuster de exportación “Corazón de león”.
“El ciudadano ilustre” es uno de los extraños casos de películas premiada tanto por el público como por los grandes festivales. ¿Intentas producir este tipo de proyectos o es algo que sucede?
La meta de la productora es la combinación de cine de autor con audiencia, que es la meta más difícil. Nosotros producimos varias películas por año -algunas de las cuales son óperas primas- intentando ver a medida que van creciendo los directores la maduración de su capacidad para dirigir. Con el caso concreto de “El ciudadano ilustre” sabíamos que queríamos llegar a donde estamos en este momento, que es la combinación entre festivales y audiencias. De cualquier manera, creemos que llegamos al máximo de la audiencia a la que le interesa este tipo de cine. Existe una audiencia mucho más masiva a la que solo le interesa un cine de entretenimiento.
Eres el productor de la película, pero has trabajado junto a varios coproductores, entre ellos los propios directores...
Para mí es muy importante coproducir con los directores en la medida que sea posible, sobre todo para que ambos entendamos la importancia de los dos roles, porque si no hay como un divorcio entre un director contratado y una productora, parecería que uno tiene que cumplir el rol de decirle “esto pueden, esto no pueden". Yo prefiero reflexionar juntos, cada uno cumpliendo su rol, pero logrando decisiones conjuntas.
¿Y qué problemas enfrentaron a la hora de producir?
No tuvimos problemas. Es un guion que tenía muchos años. En realidad, originalmente si bien yo había hecho todas las películas de Gastón y Mariano, ellos habían pensado en otra productora para esta, pero después no salió y volvimos a reencontrarnos para trabajar juntos en “El ciudadano ilustre” y en el proyecto que ya hemos comenzado a producir, que empieza a rodarse a fines de agosto. Es una película que se llama “Mi obra maestra”, la va a dirigir Gastón Duprat, los protagónicos son de Guillermo Francella y Luis Brandoni y sucede dentro del mundo del arte, muestra la amistad entre un galerista y un artista.
Será una vuelta al mundo de “El artista”, película de Duprat y Cohn del 2008.
Claro, pero es una película mucho más fluida. En “El artista” era un mundo más cerrado. En este caso es un mundo más comercial, la lucha entre el mercado, un artista que quiere quedarse en su obra pasada y todo lo que les va sucediendo. Incorporamos también a un actor español sin tener coproducción con España porque nos parecía muy importante que estuviera, que es Raúl Arévalo -nominado en los Platino por su ópera prima "Tarde para la ira”-, un actor y director estupendo.
La meta de la productora es la combinación de cine de autor con audiencia, que es la meta más difícil.
¿Se han planteado coproducir este nuevo proyecto con otros países?
Nosotros en realidad siempre hacemos coproducción con países latinoamericanos o con España. En algunos casos, como en las películas de Gastón y Mariano que son muy importantes, tratamos de cuidarlas, y si la coproducción nos fuerza a situaciones que no queremos preferimos mantener una producción propia, que es lo que vamos a hacer con la película de Gastón. Pero sí nos interesa muchísimo, de hecho ahora estamos produciendo nuestra primera película en Paraguay. Se llama “Gracias gauchito” y es la historia del Gauchito Gil, su historia real de 1860. La gente es devota del gauchito, pero no conoce su verdadera historia.
Aleph Media produce varias películas por año, incluyendo animaciones. ¿Cómo seleccionan los proyectos?
En el caso de la animación, hicimos cuatro películas con equipos distintos y es muy difícil producir animación en Argentina o en América Latina porque no hay un gran apoyo para que sea una industria. En realidad, sí están los profesionales, está todo, hay infinidad de cuentos interesantes de escritoras como Elsa Bornemann o Maria Elena Walsh, por citar algunos ejemplos. Lo que sucede es que armar un proyecto de animación lleva mucho tiempo. “Metegol” le llevó a Campanella cuatro o cinco años, es muy difícil competir con las majors. No obstante, eso no es que nos retiramos totalmente: lo que estamos haciendo ahora es continuar en animación, pero como coproductores minoritarios. Ahora estamos con una película, “Bikes, the movie” junto con España que tiene el 50%, China tiene el 30% y nosotros el 20% restante, y cada uno está cumpliendo su rol.
La productora lleva más de 20 años en el mercado. ¿Cómo ha ido cambiando tu trabajo como productor y cómo ves el cine argentino actualmente?
El cine en Argentina depende muchísimo de lo que va sucediendo en el INCAA y las regulaciones que se van dando por lo que hay cambios continuamente. Nosotros tenemos una política más a largo plazo, producimos nuestras películas y recién después pensamos en los apoyos que pueda dar el INCAA, pero siempre estamos trabajando con capital propio. El cine argentino en cuanto a calidad de proyectos está en un buen momento, aunque en los últimos dos años hemos tenido que producir películas con menos presupuestos. Yo creo que tendremos que esperar unos meses para ver qué pasa.
Foto de portada: © Casa de América de Madrid/RTVE.