BAM 2017: Creaciones de autor en la nueva cosecha documental colombiana
El mercado de promoción del cine colombiano BAM (Bogotá Audiovisual Market) presentó en su octava edición una serie de documentales de este país que verán la luz en los próximos meses. Distribuidos en las secciones Work in Progress (obras en postproducción) y Ready to Go (películas ya finalizadas), la selección permite descubrir algunas tendencias del documental colombiano, con una fuerte impronta de creaciones de autor, donde la mirada del realizador aporta la novedad respecto a la historia.
En este sentido, los directores Guillermo Quintero (“Homo Botanicus” actualmente con un rough cut), Camilo Van Hissenhoven (“Aprendiendo a volar” que se encuentra en la etapa final de la edición de imagen) y Miguel Salazar (“Ciro y yo” que recibió tres premios en la sección Ready to Go, incluyendo su participación en la próxima edición de la gira Ambulante) explicitan que la amistad con sus protagonistas es el punto de partida creativo. Esta última es además una de las tres películas que trabajan sobre el conflicto armado en Colombia, un tema que se ha vuelto uno de los denominadores comunes de la actual producción colombiana.
Por su parte, las mujeres retratadas por mujeres con el conflicto bélico de fondo, y una necesidad también explícita de acercarse a niveles socioeconómicos ajenos, están presentes en dos proyectos: “Fullhachede” (ahora en mezcla de sonido y posproduccion de imagen) de Catalina Torres y Carolina Navas, y “Alias Yineth” de Daniela Castro.
Finalmente, “La mulera” de Andrés Torres, un work in progress con el 70% del proyecto realizado, también se acerca a un determinado tipo de ciudadano colombiano excluido del sistema.
LatAm cinema comparte las primeras imágenes de estos seis documentales.
“La mulera” de Andrés Torres
Dirección: Andrés Torres. Producción: Andrés Torres, Enrique Torres y Marlon Espíndola. Empresa productora: Indigo Cine.
“La mulera” es un documental inmersivo que retrata a ‘El Loco’ Jorge, un menor barra brava del barrio Bucaramanga, que emprende un viaje de 1.000 kilómetros hasta el otro lado del país, para asistir al partido que le promete a su equipo el regreso a la división A del fútbol profesional colombiano.
“Nacer sin un lugar, sin diferencia entre el bien y el mal, ni quien lo enseñe. Crecer en un mundo inmenso y hostil, en una caja de cartón con la única certeza del vacío por llenar, y morir en la eterna derrota contra el ‘no futuro’. El retrato de un marginal resume en un rostro las consecuencias de una época. Las angustias, heridas y dolores de un hombre son los de su tiempo. Un equipo de fútbol, una religión, un partido político, el arte; utopías falsas y prediseñadas para alimentar el caminar. Algo a que regalarle la vida. Una guerra por encontrarle sentido y quizá ganarle al azar otro destino en un descuido”. Andrés Torres, director.
“Aprendiendo a volar” de Camilo Van Hissenhoven
Dirección: Camilo Van Hissenhoven. Producción: Héctor Ulloque. Empresa productora: Medio de Contención.
Benjamín nació en 2001 en Ambato, Ecuador. Llegó a Barcelona junto con sus padres hace trece an~os en búsqueda de las respuestas que no encontraron en su país de origen. Benjamín nació sin sus extremidades superiores y las inferiores afectadas como consecuencia de los efectos de la Talidomida, medicamento que se recetaba sin prescripción médica a embarazadas en varios países en los ‘60. En España, la familia de Benjamín adoptó un estilo de vida de acuerdo a las pasiones del hijo: la adrenalina y los deportes. Benja practica kung-fu, skate, surf, natación y toca batería, entre muchas otras actividades. Lo cierto es que hace y logra todo lo que se propone, convirtiendo sus limitaciones en su motor y transformando lo que para muchos sería una desgracia, en algo positivo e inspirador.
“Los realizadores de ‘Aprendiendo a volar’ han estado trabajando en este proyecto cinematográfico singular durante cinco años. Llevan todo este tiempo siendo siendo buenos amigos con Benjamín y compartiendo una vida social. Esto les ha permitido darle un desarrollo continuo al proyecto desde una perspectiva muy íntima y personal, en la cual todos están implicados de manera activa, formando parte de un equipo de trabajo singular en la labor cinematográfica y documental. Esta relación cercana e inusual ha permitido también que el rodaje que ha realizado Camilo desde hace varios años, se adentre en lo más íntimo de la vida cotidiana y de la historia de vida de su familia”. Héctor Ulloque, productor.
“Fullhachede” de Catalina Torres y Carolina Navas
Dirección: Carolina Navas y Catalina Torres. Producción: Adriana Agudelo, Catalina Torres y Carolina Navas. Empresa productora: Adriana Agudelo.
Nikol, Erika y Valentina son tres jóvenes bailarinas que inician su vida adulta en medio de un contexto hostil y también vivaz gracias a la música y la danza. Ellas, mientras se debaten en dudas existenciales, se ven obligadas a tomar decisiones para sobrevivir y quizás, transformar su destino en un humilde sector de Cali, Colombia. Un futuro incierto, el baile, la risa, la migración, la violencia, la amistad y el amor son los cimientos desde los que se construye este retrato coral femenino que nos habla sobre los sueños, la realidad y la resistencia.
“Sentíamos curiosidad y necesidad de indagar en un mundo de mujeres caleñas como nosotras, pero que les ha tocado vivir en ese otro lado de la ciudad. Nuestro documental tiene un fuerte acento humanista que nos acerca a una de las grandes paradojas de la vida: utopía y certeza. Es una película de observación y escucha con elementos experimentales que explora el sentimiento de incertidumbre que se despierta en la adultez en mujeres en un contexto violento. Nuestra narrativa incluye conflictos como ‘familia versus sueños’ o ‘identidad versus migración’ que coexisten en un contexto hostil donde la alegría resiste a la muerte y donde la esperanza surge de sueños que se derrumban”. Carolina Navas y Catalina Torres, directoras.
La selección permite descubrir algunas tendencias del documental colombiano, con una fuerte impronta de creaciones de autor.
“Homo Botanicus” de Guillermo Quintero
Dirección: Guillermo Quintero. Producción: Nicolas Van Hemelryck y Pierre Emmanuel Urcun. Empresas productoras: Casatarántula (Colombia) y Stank (Francia).
Quince años después de haber abandonado su formación como botánico, el director Guillermo Quintero decide retornar a los bosques colombianos junto a su antiguo maestro, Julio Betancur, y su nuevo discípulo, Cristian Castro. Dos exploradores que andan sin cesar, siempre a la búsqueda de sus amadas plantas, topándose con orquídeas nunca antes vistas, bromelias inesperadas, y con otras plantas improbables. A través de la relación del maestro y el discípulo se construye una reflexión sobre la obsesión del hombre moderno de controlar y cartografiar la naturaleza. En ese trópico tan diverso y casi infinito ¿con qué fin censar plantas eternamente?
“Terminé mis estudios en biología en 2004, abjurando un poco del método científico. El destino me deparó un encuentro con el mundo audiovisual. Ahora, como documentalista, me reencuentro con mi maestro. Recorremos trochas y caminos empinados y en esos momentos, en mis reflexiones, me sumerjo en esa idea clara y poderosa que evoca la relación entre el maestro y sus estudiantes, sus futuros aprendices, sus discípulos, y me invade una especie de epifanía sobre estos lazos, esenciales para la conservación del legado de la botánica. Y yo también puedo verme por momentos bajo su ala, crecer a su lado y convertirme en ese botánico consagrado e imaginario que nunca existió. He encontrado ahora mi lugar junto a Julio y Cristian, cámara al hombro, para contar su historia”. Guillermo Quintero, director.
“Ciro y yo” de Miguel Salazar
Dirección: Miguel Salazar. Producción: Catalina Vela y Miguel Salazar. Empresa productora: Producciones La Esperanza.
Ciro Galindo nació el 29 de agosto de 1952 en Colombia. A donde quiera que ha ido, la guerra lo ha encontrado. Tras 20 años de amistad con Ciro, comprendí que su vida resume la historia de Colombia. Como tantos colombianos, es un sobreviviente, que después de sesenta años de huir de la guerra, sueña con vivir en paz. “Ciro y yo” es un viaje a la memoria en busca de darle palabra al dolor; un viaje, como el de Colombia en tiempos de paz, en busca de recuperar su dignidad.
“Alias Yineth” de Daniela Castro Valencia y Nicolás Ordóñez
Dirección: Daniela Castro Valencia y Nicolás Ordóñez. Producción: Rocío Caro Villamil. Empresa productora: Rhayuela Cine SA.
La historia de Yineth es la historia de una mujer que se transforma, se reinventa. Esta metamorfosis sucede dentro de un período de guerra de 17 años, entre un proceso de paz y otro. La historia de Yineth es transversal al dolor de esta patria. La guerra condicionó no solo la infancia de Yineth, sino también su destino, provocando así un sueño: el de ser una mujer sin pasado, o por lo menos con otro pasado, un sujeto anónimo que pueda perderse entre todos, en los sueños estándar de una sociedad, porque sabe que no es igual a todos. La identidad de esta mujer ha mutado a través de siete nombres: cada uno de estos corresponden a la puntuación con que esta película se cuenta. Leidy la mujer enamorada, Yira Tatiana la niña campesina, Yinan la adolescente guerrillera, Tania la de los tacones altos y la sensualidad a flor de piel, Yaxalem la certeza de tener un nombre ya para el futuro.
“Yineth es una persona corriente, tan humana como nosotros, se mimetiza con la gran masa de personas porque ese ha sido su gran anhelo, perderse entre todos. Pero ella en el fondo sabe que no es igual a todos y esto es una condición que rebasa nuestra experiencia y nos confronta a nivel emocional con nuestra memoria. Esta reflexión que puede dar cuenta de un grupo de jóvenes citadinos con acceso a la educación, explota en el encuentro con la historia de vida de Yineth, la que redimensiona nuestro pasado y nuestro presente, pero sobretodo la que nos evidencia que ella encarna la compleja y absurda historia de violencia de Colombia, el círculo vicioso del que no podemos salir. Esto nos lleva a una reflexión más amplia, y es que si bien la guerra en Colombia tiene muchas particularidades, la guerra es una, y donde suceda aplasta a la humanidad de la misma manera”. Daniela Castro Valencia y Nicolás Ordóñez, directores.