• Ñuble se posiciona como nuevo destino cinematográfico y punto de encuentro del cine chileno

    Imagen de la gala de entrega de premios.

  • Ñuble se posiciona como nuevo destino cinematográfico y punto de encuentro del cine chileno

    Presentación de Filma en Ñuble.

  • Ñuble se posiciona como nuevo destino cinematográfico y punto de encuentro del cine chileno

    Ganadores del 5º Festival de Cine Nacional de Ñuble.

Ñuble se posiciona como nuevo destino cinematográfico y punto de encuentro del cine chileno

El 14 de enero culminó la quinta edición del Festival de Cine Nacional de Ñuble, evento que durante seis días llevó adelante en Chillán y otras comunas de esta región chilena la exhibición gratuita de películas y varios espacios de formación e industria.

El festival nació en 2019 con el objetivo de posicionarse como un punto de encuentro del cine chileno en la zona Centro Sur y desde entonces ha ido creciendo año a año. “Cuando comenzamos éramos cuatro personas poniendo pantallas inflables a lo largo de la región. Hicimos siete comunas distintas itinerando, y a pesar de que era una muestra, lo llamamos desde un primer momento ‘festival’, porque sabíamos que estábamos construyendo un festival. Ya el segundo año pudimos tener nuestra sala principal en el Teatro Municipal de Chillán, con capacidad para 1200 personas. Hoy en día somos 140 personas trabajando en el festival”, cuenta a LatAm cinema Tomás Alzamora, director artístico del certamen. 

Entre las iniciativas que han puesto en marcha este año, Alzamora destaca un programa titulado “Filma en Ñuble”, creada con el apoyo de CORFO (Corporación de Fomento de la producción de Chile). Esta iniciativa busca transformar la región chilena de Ñuble, conformada oficialmente en 2018, en un nuevo destino para la realización de producciones cinematográficas nacionales e internacionales. El festival fue el marco elegido para un encuentro de capacitación para representantes de instituciones públicas, empresas y emprendimientos locales sobre las posibilidades de crecimiento de la producción audiovisual latinoamericana.

Al respecto, la directora regional de CORFO, Macarena Dávila, explica a LatAm cinema: “La región de Ñuble cuenta con una oferta de locaciones atractivas para las productoras de contenido audiovisual, ya sea por su variedad de paisajes de mar a cordillera o por sus características climáticas favorables. Experiencias nacionales e internacionales evidencian el impacto positivo de la realización de proyectos audiovisuales en aquellos rubros que se ven involucrados en su producción y logística. Por tanto, desde CORFO estamos apoyando iniciativas como ‘Filma en Ñuble’ que apunten en esta dirección. Este encuentro incluyó el lanzamiento del primer Catálogo de Locaciones Fílmicas de la región. A mediano plazo, la asociación entre el festival y CORFO se propone activar la Comisión Fílmica, realizar proyectos audiovisuales conjuntos, y explorar el acceso a festivales y ferias internacionales con el apoyo de ProChile Ñuble”.

“La región de Ñuble cuenta con una oferta de locaciones atractivas para las productoras de contenido audiovisual, ya sea por su variedad de paisajes de mar a cordillera o por sus características climáticas favorables”.

El festival también se propone seguir creciendo en su área de industria y formación, ofreciendo talleres y una escuela de cine para adolescentes. Uno de sus espacios más relevantes es Confluencias, un encuentro para realizadores audiovisuales nacionales que fomenta el intercambio a través del trabajo colaborativo a través de tres espacios: el Laboratorio de óperas primas, el Laboratorio documental regional, y el Laboratorio de Nuevos Medios.

“El laboratorio de óperas primas surgió porque queríamos potenciar nuevos talentos, ayudar a los autores jóvenes y vincularlos con el medio. Siempre incluimos un proyecto seleccionado de la región”, cuenta a LatAm cinema Pablo Calisto, director ejecutivo del festival. La última edición de este espacio no competitivo seleccionó seis óperas primas de ficción en desarrollo: “La oveja trasquilada” de Rossana Castillo, “Chincolito” de Zara Monardes, “Plasma” de Daniel Aspillaga, “Tal vez mañana todo comience de nuevo” de Vìctor Hugo Perona, “Vírgenes de yeso” de Katherina Harder, y “El jardín rojo” de Sebastián Palominos.

En el Laboratorio de documental regional, para regiones distintas a la metropolitana, participaron los documentales en desarrollo “Acople subterráneo” de Antonia Valladares Fischer, “Ame Bolivia” de Carlos Villegas Leiva, “Juegos de la imaginación” de Natalia Jara, “Por fin tus huellas” de Cristián Hidalgo, “La noche más larga” de Mackarena Veas, y “María tres cocos” de Caro Cheuquepan. Por último, el Laboratorio de Nuevos Medios fue creado con el objetivo de que los proyectos trabajen por la mañana con los asesores y por las tardes sean exhibido al público en la sala de Nuevos Medios en formato prototipo”, cuenta Calisto. Los tres proyectos participantes en esta categoría fueron “Espectro derivas” de Almendra Díaz, “The Omnigallery” de Ignacio Farías, e “Infinitas VR” de Javier Garay.

La película inaugural de esta quinta edición del festival fue “Historia y Geografía” de Bernardo Quesney y la de clausura “El realismo socialista” de Raúl Ruiz y Valeria Sarmiento. El premio al mejor largometraje de la selección oficial fue para “Muertes y maravillas” de Diego Soto. “Las demás” de Alejandra Hyland recibió el Premio Especial del Jurado y “Malqueridas” de Tana Gilbert el Premio del Público.

Otros largometrajes nacionales exhibidos fueron “Penal Cordillera” de Felipe Carmona, “El que baila pasa” de Carlos Araya Díaz, e “Isla Alien” de Cristóbal Valenzuela Berríos. La programación se complementó con una selección de cortometrajes, una muestra de cine infantil y la mencionada sala de nuevos medios. A futuro, el festival aspira a incorporar asesores internacionales, mejorar su programación y ampliar sus espacios formativos.