Una nueva generación de comisiones fílmicas latinoamericanas
Seis film commissions que iniciaron su recorrido hace relativamente poco explican su proceso de construcción desde los inicios, los desafíos a los que se han enfrentado y sus planes a futuro. Se trata de las comisiones de Jujuy en Argentina, Salvador en Brasil, Filmagallanes y Ñuble en Chile, Morelia en México y Asunción en Paraguay. Aunque todas transitan realidades diferentes, comparten el propósito común de promover la industria audiovisual como base para el desarrollo económico y social en sus respectivos territorios. Artículo publicado en el número 1 de Bizzual.
Jujuy: polo de referencia en el norte argentino
La Comisión de Filmaciones de Jujuy fue creada a partir de una ley provincial para el audiovisual en 2014, pero se puso en funcionamiento recién en 2017, primero, como dependencia del Ministerio de Cultura y Turismo de la Provincia, y luego, en 2022, con la creación del Instituto de Artes Audiovisuales de Jujuy (IAAJ), pasó a formar parte de esta institución. Esta comisión cuenta con una Dirección General, un área administrativa, una de Permisos y una de Locaciones. Si bien los municipios de Jujuy no integran la comisión, son componentes con los que se trabaja en distintos convenios y programas de capacitación como “Poné tu Productora en Acción”, que busca capacitar y financiar la creación de empresas audiovisuales locales.
Hoy por hoy, la comisión cuenta con tres incentivos económicos para fomentar las producciones, argentinas y extranjeras, en su territorio. El programa de cash rebate ofrece un reembolso de hasta el 30% de los gastos realizados en una producción, con un tope máximo de devolución de 80 millones de pesos argentinos (unos 80.000 dólares) y una inversión mínima en producción de 15 millones argentinos (unos 15.000 dólares). Los otros dos incentivos – Apoyo a Rodajes Locales y Apoyo a la Realización de Videoclips – están destinados a productoras jujeñas.
Sobre los desafíos que han tenido que superar, la directora de la institución, Silvana Espinosa, comenta: “Como la Comisión de Filmaciones de Jujuy tiene injerencia provincial en la gestión de permisos de filmación, la primera dificultad a la que nos enfrentamos fue ordenar la normativa para establecer un mecanismo de permisos en común con los municipios. Comenzamos a trabajar a través de convenios para unificar un sistema de permisos de filmación y a capacitar a los municipios. De esta manera, se busca garantizar que los rodajes se realicen de manera más efectiva, ágil y sin generar inconvenientes con la comunidad, velando también por el cuidado del ambiente y el patrimonio provincial, dos ejes sobre los cuales trabajamos desde la comisión”.
Desde la conformación de la institución se han realizado más de 100 producciones audiovisuales en Jujuy, incluyendo los largometrajes “Mi obra maestra” de Gastón Duprat, “Pipa” de Alejandro Montiel, “Objetos” de Jorge Dorado, y las series “Night Sky”, “El reino” y “Las rutas más peligrosas”.
La estrategia desde la Comisión es convertir a Jujuy en un polo de referencia del norte argentino a través del Plan Jujuy Audiovisual, que fomenta concursos, subsidios y capacitaciones, y del trabajo que realiza el Festival de Cine de las Alturas y el Cine Móvil dando pantalla a las producciones regionales, que consiguen llegar así a nuevas audiencias.
Salvador: del carnaval a la pantalla
Salvador Film Commission (SSA Film Commission) fue creada en mayo de 2023, cuando la Secretaría de Cultura y Turismo del municipio de São Salvador da Bahia lanzó el programa Salcine, destinado al desarrollo del sector audiovisual en la capital de este estado brasileño. El proyecto se estructuró sobre cuatro pilares: negocios, infraestructura, capacitación y financiamiento.
“Salvador tiene un gran conocimiento acumulado en la gestión y operación de grandes fiestas en espacios públicos, el carnaval es un caso paradigmático. Sin embargo, el sector audiovisual requiere de una sensibilidad diferente. El trabajo de una film commission sólo tendrá éxito si toda la estructura municipal trabaja de forma integrada, respondiendo con rapidez y eficacia”, explican desde la organización.
En materia de incentivos, actualmente se están coordinando alianzas con el sector turístico para ofrecer tarifas atractivas en servicios audiovisuales y en alojamiento, transporte y alimentación. También esperan consolidar en el corto plazo una política de reembolso en efectivo, sumándose así a los principales polos de producción audiovisual de Brasil: São Paulo y Río de Janeiro. La SSA Film Commission forma parte de un grupo de trabajo con representantes de todo Brasil que aspira a consolidar una comisión cinematográfica a nivel país.
En relación a los fondos económicos volcados por el gobierno de Bahía, los integrantes de la comisión fílmica comentaron que se invirtieron más de 20 millones de reales en 2023 (3,5 millones de dólares aproximadamente) en desarrollo de proyectos de largometrajes y cortometrajes, y en la construcción de un hub de estudios de grabación que será “el mayor complejo de infraestructura audiovisual fuera del eje Río de Janeiro-São Paulo”, según informan desde la comisión.
Ñuble: tras los pasos de Filmagallanes
Filmagallanes es la inspiración que siguen desde hace unos meses en Ñuble con el objetivo de consolidarse como comisión fílmica. El caso del referente comenzó en 2020 en Punta Arenas, capital de Magallanes, la zona más austral de la Patagonia chilena. El impulso para concretar una comisión fílmica en este territorio “del fin del mundo” terminó de constituirse durante la pandemia de Covid-19.
Rodrigo Moreno, locacionista y coordinador de Filmagallanes, comenta sobre los orígenes de la iniciativa en plena crisis del turismo por las restricciones del covid: “Se realizaron reuniones informativas y alguien entre los presentes sugirió el tema del turismo cinematográfico tomando como ejemplo los casos de Nueva Zelanda y Tenerife, dos territorios extremos en su condición de islas”. Previa licitación pública, las productoras Nothing Matters y Drunk in Public realizaron un mapeo de locaciones para informar, a gobernantes, empresarios y estancieros, del potencial que ofrece crear una comisión fílmica regional y para organizar programas de educación.
Una vez pasado el confinamiento, el Gobierno Regional de Magallanes y Antártica Chile, con el apoyo de la Corporación de Fomento de la Producción del Gobierno de Chile (Corfo), ejecutó el Programa de Reactivación del Turismo en Tiempos de Crisis. Con la financiación inicial, en 2022 se publicó la web y la primera edición de un catálogo audiovisual de locaciones de la Patagonia chilena.
“Hicimos de la plataforma nuestro caballito de batalla, es por eso que nos ha ido bien. Creamos la plataforma con mirada de productores, de locacionistas, entendiendo que sería una herramienta de ayuda para quien busca. Al acceder tienes también información útil, como contactos, tips de vestuario, clima y capacidad máxima de equipo de rodaje. Esta plataforma sirve para tener un primer acercamiento a la región”, comenta Moreno.
El rodaje de dos producciones de gran alcance internacional en Magallanes ha aumentado su visibilidad: “El conde” de Pablo Larraín y “Los colonos” de Felipe Gálvez. Sobre esto, comenta Moreno: “Gracias a ese boom se hace más fácil la conversación con la gente de Magallanes, para darles ejemplos concretos de lo que sucede si traes una producción”. Y agrega: “Queremos traer a Magallanes a directores y productoras que estén radicadas en Santiago para que nos conozcan a través de fam trips y consolidar una serie de incentivos y ayudas procedentes del sector privado. Aspiramos a acuerdos con los gremios de turismo para que ellos nos puedan ayudar a tratar de conseguir, por ejemplo, hotelería más barata o un descuento en los pasajes. Ese tipo de ayudas son más rápidas y más fáciles de activar”.
Aunque todas transitan realidades diferentes, comparten el propósito común de promover la industria audiovisual como base para el desarrollo económico y social en sus respectivos territorios.
Otra de las iniciativas en marcha es la realización de workshops enfocados en que las nuevas generaciones en Magallanes adquieran una mirada de locacionista y entiendan cómo funciona ese servicio, incluyendo un taller dirigido a guías de turismo. Sobre esta última actividad, comenta Moreno: “A veces llega un realizador extranjero y, al no tener otro referente local, se topa con un guía a quien le pide recomendaciones, pero ellos pueden tener una mirada de turismo y no de audiovisual. Queremos que también incorporen la mirada de la industria. A veces se pierde la llegada de un proyecto interesante por falta de formación específica”.
Este modelo es el que siguen los impulsores de la film commission de Ñuble, región chilena creada en 2018 que se encuentra al sur de la Región Metropolitana de Santiago. Tomás Alzamora Muñoz, director del Festival de Cine Nacional de Ñuble, es uno de los principales promotores de la comisión junto a Macarena Dávila, directora regional de Corfo Ñuble, Pablo Witker, responsable regional del Programa Territorial Integrado de Corfo (PTI), y la productora Sur Scouting, una de las desarrolladoras del primer catálogo de locaciones de Ñuble.
El proceso se puso en marcha con la creación de Ñuble Films, una marca audiovisual creada e implementada con fondos a dos años aportados por Corfo. En enero de este año, en el marco del Festival de Cine Nacional de Ñuble, se organizó Filma en Ñuble, donde se presentó el catálogo, se realizó una feria de mercado audiovisual y se programaron una serie de conferencias, dos de ellas centradas en casos modélicos de comisiones fílmicas de referencia: la Comisión Fílmica de Colombia y Filmagallanes.
Actualmente, las producciones audiovisuales que se realizan en Ñuble, y en las restantes regiones de Chile, cuentan con un incentivo fiscal impulsado desde el programa de Apoyo a inversiones Audiovisuales de Alto Impacto (IFI Audiovisual), también de Corfo. El instrumento, que busca aumentar la cantidad de producciones audiovisuales internacionales en el país, se dirige a producciones audiovisuales filmadas total o parcialmente en Chile con un gasto en territorio chileno de entre 1 y 3 millones de dólares. El reembolso establecido es del 30%, aunque aumenta al 40% si los gastos se realizan en regiones distintas a la Metropolitana.
Morelia: pensar a mediano plazo
Ejemplo de impulso desde la gobernanza local, la Comisión Fílmica de Morelia se constituyó como órgano integrante de la Secretaría de Cultura Municipal de Morelia, uno de los 113 municipios del estado mexicano de Michoacán, y opera oficialmente desde febrero de 2024.
Alejandro Sosa y Juan Pablo Arroyo Abraham, dos de los principales impulsores de la comisión, recuerdan que la idea comenzó a tomar forma hace muchos años con vocación estatal, pero la burocracia y las diferencias político-partidarias truncaron el propósito. Sin embargo, cuando Sosa y Arroyo les expusieron la idea a las autoridades del Ayuntamiento de Morelia, la iniciativa comenzó a rodar con fluidez: “Les dijimos que íbamos a crear una comisión que estuviera insertada en la ley, con una estructura jurídica y que funcionara como una ventanilla única, que es muy importante. Dijeron que sí, se pasó la propuesta a Cabildo y se votó a favor”.
Superados los dos primeros retos, el administrativo y el financiero, cabía enfrentarse a otro igual de complejo: la seguridad. “Michoacán ha tenido mala fama por este tema, pero ahora mismo estamos ofreciendo una de las ciudades más bonitas y más seguras de México, porque junto a la comisión fílmica están trabajando todas las demás áreas del gobierno municipal, incluyendo la policía”, compartió Arroyo.
Además, Morelia está en condiciones de ofrecer un beneficio no menor, comenta Arroyo, costos más reducidos: “Rodar en Morelia es un 30% más barato que hacerlo en Ciudad de México. No ofrecemos cash rebate ni devolución de impuestos, pero lo estamos intentando compensar a través de promociones y descuentos en hoteles, restaurantes y otros agentes de servicios”.
La ciudad está haciendo fuerte apuesta por la educación, con la previsión de comenzar con formación para sonidistas, directores de fotografía y camarógrafos: “Queremos hacer intercambios con las comisiones fílmicas de España y de otros lugares para empezar a traer maestros y profesionales en determinadas áreas a que den clases en Morelia”, señala Sosa.
Entre sus metas fundacionales, casi una postura filosófica, la comisión se plantea restablecer el tejido social en la ciudad, generando así un círculo virtuoso ideológico, social y económico: “Es uno de mis objetivos principales, como ciudadano y como cineasta. Cuando tengamos dos o tres películas grandes hechas aquí, que esperamos suceda antes de junio de 2025, creo que seremos una comisión fuerte y ojalá que nunca desaparezca, porque aquí, en México, los proyectos que se hacen con un gobierno pueden desaparecer cuando llega otro. Por eso, – recuerda Arroyo – estamos luchando para que el comité ciudadano de la Comisión Fílmica de Morelia sea lo suficientemente fuerte para que pueda decirle al siguiente gobierno, en caso de que cambie: este proyecto ha funcionado y defendemos que no desaparezca”.
Asunción: abriendo camino en Paraguay
Por último, la Comisión Fílmica de Asunción (Cofilma) fue establecida formalmente en 2023, pero el inicio de su recorrido se remonta a 2015. Sobre las dificultades en el inicio, comenta Marcela Bacigalupo, directora general de Cultura y Turismo de la Municipalidad de Asunción: “La comisión nunca fue realmente constituida, principalmente porque la Ordenanza de 2015, por la forma en que estaba redactada, era inaplicable. Con la Ordenanza de 2023 se derogó la anterior y se creó efectivamente la comisión”.
Al día de hoy, Cofilma es la única film commission que existe en Paraguay. Cuenta con un Consejo Directivo de nueve miembros que representan a la Dirección General de Cultura y Turismo de la Municipalidad de Asunción, la Cámara Paraguaya de Cine y Televisión, la Organización de Profesionales del Audiovisual Paraguayo, la Academia de Ciencias y Artes Cinematográficas, y las cámaras de exhibidores, distribuidores y salas alternativas. Actualmente Cofilma se concentra en ofrecer “el uso ordenado y seguro” de las locaciones en la ciudad y trabaja para “mejorar las oportunidades y los servicios” que ofrece a las productoras.