Decir que 2020 ha cambiado la industria de la distribución es ya casi una obviedad. Durante este alborotado año varias agencias de ventas se reinventaron, algunas incorporaron en su modelo de negocio la producción de contenidos, otras aceleraron su proceso hacia las distribución en plataformas y otras también nacieron. Es el caso de Feel Content, una empresa con sede en Madrid que surge con el objetivo de “conectar tanto con nuevos talentos como con reconocidos directores de cine españoles, europeos y latinoamericanos, para conseguir que sus películas alcancen máxima visibilidad a nivel internacional”, según explica a LatAm cinema una de sus socias, Geráldine Gonard, quien también es fundadora de Inside Content y directora del evento de coproducción internacional Conecta Fiction.
Feel Content se orienta a “películas de autor y también películas más comerciales. Lo importante es que la película tenga posibilidades comerciales y encaje con el tipo de contenido que están buscando nuestros clientes”, explica Luis Collar, el otro socio de la flamante compañía. Collar tiene una sólida relación con América Latina desde The Circular Group, compañía que también fundó y que aglutina a la agencia de ventas dedicada a documentales y cortos Feelsales, la empresa de organización de festivales Great Ways y la productora Nephilim (coproductora de la uruguaya “Los tiburones”, la mexicana “Sin señas particulares”, la paraguaya “7 cajas” o la peruana “Magallanes”, entre otras).
En su line-up, que fue presentado en la pasada edición de Ventana Sur, cuentan con dos filmes latinoamericanos: “Karakol” de Saula Benavente (Argentina) y “Amores modernos” de Matías Meyer (México). Su catálogo más reciente se completa con producciones españolas, como “Pullman” del mallorquín Toni Bestard o “Invisibles” de la madrileña Gracia Querejeta. También se orientan a producciones en portugués, cine latino estadounidense y europeo. “Nuestro propósito es ser un punto de conexión e intercambio entre los dos continentes, América y Europa”, señala Gonard.
La intención de la compañía es adquirir en torno a 20 películas recientes y otras tantas de catálogo, según explica Collar. La empresa trabaja tanto en festivales como en ventas, entendiendo ambas fases como un proceso complementario que se retroalimenta; e, idealmente, buscan recibir las películas “cuando haya un primer montaje, aunque podemos recibir proyectos en desarrollo, a punto de rodarse o películas terminadas. Hemos entrado en películas que estén en fase de guion, pero son casos más excepcionales”, expresan.
Gonard y Collar proyectan el 2021 con optimismo. “Se han multiplicado las pantallas y se consumen todo tipo de películas, desde obras autorales, más de festivales, hasta obras para todo el público, o películas de nicho. Estamos en un momento de alta demanda de contenido audiovisual”, señala Gonard. Por su parte, Collar augura que “las ventas en televisiones se mantendrán, las ventas en plataformas aumentarán (el crecimiento en los últimos años está siendo espectacular) y las ventas en theatrical, non theatrical o aerolíneas seguirán estancadas o subirán en el segundo semestre del año”.