Los programadores: Entrevista a Andrés Castillo, Director de Programación de Miami

Miami International Film Festival (MIFF) se ha convertido en la puerta de ingreso a Estados Unidos del cine latinoamericano. Si bien hay en el país diversos certámenes sobre cine latino, MIFF se ha desmarcado del resto al no limitarse a ser solo una pantalla de exhibición y difusión, generando una instancia de ayuda a los proyectos de la región. Dialogamos con Andrés Castillo, Director de Programación de MIFF.

¿Cómo describirías el perfil de la programación y el criterio de selección del Festival de Miami?
El festival de cine de Miami tiene un perfil internacional con una programación de más de 130 películas que vienen de todas partes del mundo. A diferencia de otros festivales internacionales, el de Miami tiene un focus en Iberoamérica, destacando las películas de la región con dos competencias muy importantes: la competencia principal Knight y la competencia Lexus de Operas Prima. El festival también enfatiza su contribución al cine iberoamericano con el programa Miami Encuentros de post-producción.

¿Cuál es el modo de trabajo para conformar la programación final?
Hay cinco programadores que forman parte del equipo de trabajo del festival de cine. Thom Powers se dedica específicamente a invitar documentales, Jane Schoettle está encargada de las películas independientes americanas, Jaie Laplante y yo invitamos pelis en todas las categorías, incluyendo documentales y películas independientes americanas. Diana Sanchez se encarga de la programación de Miami Encuentros. Los programadores buscamos las películas y discutimos con el director del festival acerca de cuáles podrían funcionar y en qué categorías. También hay que decidir si ciertos títulos estarán dentro o fuera de competencia.

¿Con qué limitaciones te encuentras a la hora de negociar la participación de una película?
Programar un festival en Estados Unidos siempre es un reto muy grande, ya que es uno de los mercados más importantes del cine mundial. Aparte hay muchos festivales en este país de gran nombre y cachet, los cuales requieren que ciertas pelis tengan disponibles algún tipo de premiere. Influye mucho también en qué festival ciertas pelis hacen su premiere mundial o internacional para poder determinar si van a venir a nuestro festival.

¿En el proceso de negociación de una película generalmente participan los productores o los agentes de venta?
Si la peli no tiene agente de ventas, entonces se trabaja con los productores. Si la peli ya tiene agente de ventas, entonces ellos son los que toman las decisiones del estreno o de participación de dicha película en los festivales del mundo. Hay casos en que los productores pueden tomar decisiones acerca de los festivales que pudieran invitar su peli, y hay muchos casos también en que los productores se quedan con el control total de las ventas de los territorios de origen de la película.

¿Crees que el screening fee se ha vuelto algo indispensable para contar con las películas de mayor destaque?
El screening fee como todos los factores del cine contemporáneo tiene gran importancia y a veces es justificado. Creo que cada película es un universo lleno de posibilidades y hay que analizar cada una de ellas como situación única. En mi caso, yo analizo si vale la pena pagar un screening fee, en especial si una peli todavía no tiene distribución, ya que los festivales aportamos mucho con la promoción y la estrategia de mercado de algunas pelis. Cuando la peli ya tiene distribución, me parece que las cosas cambian, ya que alguna compañía adquirió los derechos de la peli para un territorio y esperan recuperar y empezar a generar ingresos para dicho título.

El festival si bien es en Estados Unidos, en fecha se posiciona muy cerca de festivales latinoamericanos como Cartagena y Guadalajara, con los que se podría decir que comparten un perfil similar. ¿Cómo repercute esto en el armado de la programación?
Los festivales de Cartagena y el de Guadalajara trabajan en conjunto con el festival de cine de Miami, para poder presentar lo mejor del cine iberoamericano y mundial en los tres festivales. La industria de los tres festivales tiene una relación sinérgica, en base a un proceso cooperativo que funciona en muchos niveles. Un ejemplo es que si una persona está acreditada en el festival de Miami, su acreditación será validada en Cartagena y en Guadalajara, y viceversa. Creo que a todos nos beneficia tener perfiles parecidos a la hora de programar las pelis y de iniciar el proceso de los viajes para los invitados.

“Programar un festival en Estados Unidos siempre es un reto muy grande, ya que es uno de los mercados más importantes del cine mundial”.