• Isabel Arrate Fernández, vicedirectora del IDFA Bertha Fund

Isabel Arrate Fernández, vicedirectora del IDFA Bertha Fund

Creada por Brazilian ContentCinema do Brasil y Projeto ParadisoShow me the Fund busca conectar a los productores audiovisuales con fondos de financiación de todo el mundo. El proyecto parte de una investigación realizada en 2020 por LatAm cinema en la que se seleccionaron 50 oportunidades de financiación abiertas a productores de toda Latinoamérica. En 2021, el proyecto se convirtió en una plataforma digital que apuesta por la democratización de la información para el desarrollo del audiovisual en Brasil y el resto de la región. Ese mismo año, lanzamos Focus on Funds con el objetivo de ahondar en la información ofrecida en Show me the Fund. Esta entrevista ha sido incluida en la revista digital Nº49 de LatAm cinema.

Creado por el Festival Internacional de Cine Documental de Ámsterdam (IDFA), IDFA Bertha Fund (IBF) lleva 25 años apoyando a cineastas independientes de regiones donde no siempre es posible realizar documentales debido a la falta de recursos y/o al clima político. A partir de la idea de que la oferta en el circuito de festivales era predominantemente europea y norteamericana, el objetivo de esta iniciativa es apoyar películas documentales que ejerzan de contrapeso al predominio occidental en la industria cinematográfica, y que estén narradas por cineastas que trabajan en circunstancias desafiantes, tanto económicas, como políticas y sociales.

Además de proporcionar ayuda financiera al desarrollo, la producción y la postproducción a través de distintos programas, el Fondo puso en marcha IBF Europe, un programa que ofrece financiación a coproducciones internacionales con coproductores minoritarios europeos.

Isabel Arrate Fernández está al frente del IBF desde 2002. Con un máster en Estudios Cinematográficos por la Universidad de Ámsterdam, Arrate Fernández trabajó en producción de festivales, y en las áreas de programación y financiación de películas antes de incorporarse al festival neerlandés.

¿A quién están dirigidos los fondos y cuáles están disponibles para productores/cineastas latinoamericanos?

Tenemos dos programas, y ambos están abiertos a proyectos de América Latina. Sin embargo, existen restricciones para algunos países, así que conviene consultar nuestra lista de países. IBF Classic cuenta con dos líneas de ayudas para documentales de cualquier duración: una dirigida al desarrollo de proyectos (IBF Project Development) y otra a la producción y postproducción (IBF Production & Post-production). Mientras que las primeras buscan apoyar al director en las primeras fases del proyecto, las ayudas a la postproducción son para proyectos en cualquier etapa de desarrollo y pueden ser solicitadas por el director y/o el productor.

En el caso de coproducciones internacionales, el productor principal debe estar en América Latina. Las solicitudes deben ser realizadas por un coproductor europeo que sea socio minoritario (mínimo 20%) en el proyecto. Además, si hay más socios europeos, juntos no pueden tener más del 70% del proyecto.

¿Qué tipo de proyectos encajan mejor en la línea editorial del IDFA Bertha Fund?  

Estamos interesados en documentales de autor, películas que expresen una visión artística y empleen un lenguaje visual intenso. Al mismo tiempo, y esto viene de la mano del documental, para nosotros es importante que las películas reflexionen sobre historias importantes y necesarias. Sin embargo, lo que está en la base de nuestra línea editorial es la visión artística. En este sentido, hay que tener en cuenta que el Fondo fue creado por amantes del cine, por lo que apreciamos y celebramos la experiencia cinematográfica del documental.

El Fondo fue creado por amantes del cine, por lo que apreciamos y celebramos la experiencia cinematográfica del documental.

¿Han detectado tendencias de algún tipo en los proyectos de ediciones anteriores?

Latinoamérica es un territorio enorme con un montón de países, por lo que es difícil generalizar. Sin embargo, algo que estamos viendo son las consecuencias de los cambios políticos y económicos en los países latinoamericanos cuyos fondos cinematográficos nacionales fueron cancelados o sufrieron drásticos recortes presupuestarios en los últimos años.

Y a pesar de todas las repercusiones del Covid, también podemos decir que hay un flujo constante de nuevos cineastas procedentes del continente. Por supuesto, fundamentalmente me refiero a países donde la cultura y el cine cuentan con el apoyo del Estado, lo cual es crucial. Y lo que es más importante, se está produciendo un cambio en el lenguaje cinematográfico, con ideas nuevas y desafiantes que llegan de la mano de las nuevas generaciones.

¿Cuál es la relación del Fondo con América Latina? 

La relación del IBF con América Latina se remonta a 1998. Desde entonces hemos apoyado muchos proyectos documentales de esta región, directores como David Blaustein, Carmen Guarini o Marcelo Céspedes, y, más recientemente, las primeras películas de Iván Osnovikoff, Bettina Perut o Maite Alberdi. Además, hasta 2012 el fondo también apoyó festivales de cine y eventos documentales, no solo financieramente, sino también haciendo posible la asistencia de programadores de festivales al IDFA. Así comenzó la colaboración con el festival EDOC en Ecuador, también apoyamos varias ediciones del Festidoc Paraguay, FIDOCS en Chile, DOC Buenos Aires, y, en un momento, junto a más de 10 festivales, organizamos una exhibición itinerante de películas latinoamericanas apoyadas por el Fondo. Fue una idea que realizamos junto al fallecido Ricardo Restrepo en tiempos en que las películas no eran accesibles a los programadores a través de enlaces en línea.

En los últimos años, hemos participado en óperas primas como las brasileñas “5 casas” de Bruno Gularte Barreto y “Meu querido supermercado” de Tali Yankelevich o “Once Upon a Time in Venezuela” de Anabel Rodríguez Ríos. También hemos apoyado proyectos recientes como “El agente topo” de Maite Alberdi, y el nuevo proyecto documental de Tatiana Huezo, “El eco”. Este año vimos el estreno de “Alis” de Clare Weiskopf y Nicolás van Hemelryck en la Berlinale, y en los próximos meses se estrenarán las nuevas películas de Manuel Abramovich y Theo Montoya.

A la hora de preguntar qué buscamos, conviene recordar que apoyamos proyectos de cinco continentes y más de 150 países. Por lo tanto, está claro que no buscamos proyectos de un continente en especial, pero sí tenemos un interés específico en proyectos de países donde la industria del cine documental está en desarrollo. En el caso de América Latina, estaríamos hablando principalmente de países de América Central.

¿Qué consejo les daría a los cineastas latinoamericanos que están pensando en presentarse al fondo?

A la hora de solicitar financiación, conviene investigar qué tipo de proyectos y películas solemos apoyar para corroborar que el proyecto encaje con nuestra línea editorial. Además, como ocurre con la mayoría de los fondos internacionales, el proceso es bastante engorroso, por lo que conviene tener a mano toda la información necesaria antes de ponerse a completar la solicitud. También les recomiendo que se tomen el tiempo necesario para preparar su solicitud y que reserven algo de tiempo para repasar los textos y los materiales visuales que vayan a enviar. Y, sobre todo en el caso de cineastas que trabajan solos, es aconsejable pedir la opinión de algún colega antes de postularse. Por último, recuerden que no están enviando su solicitud al vacío, sino que hay gente al otro lado, por lo que siempre pueden preguntarnos, aunque se agradece que primero intenten encontrar la respuesta en la información disponible en internet.