Pau Montagud e Inti Cordera, directores de DocsDF
A escasos días de la inauguración de DocsDF, LatAm cinema conversó con Inti Cordera y Pau Montagud, directores de uno de los festivales de cine documental más importantes de Latinoamérica. En su octava edición DocsDF ofrecerá, del 24 de octubre al 3 de noviembre, unos 166 títulos provenientes de más de 70 países, seminarios y talleres de formación a cargo de Lech Kowalski, Albert Maysles, el Tribeca Film Institute y el IMCINE así como diversas actividades enmarcadas dentro del for DocsForum. Por Patricia Zavala.
¿Cómo definen la línea editorial de DocsDF, y de qué manera se relaciona con sus múltiples actividades paralelas?
P.M.: Nuestra línea editorial es muy clara, se basa en lo que entendemos por documentales de la mejor calidad, que tengan una buena factura cinematográfica y que tengan un contenido importante, que sean historias que merezcan difundirse. Es una línea de compromiso con la información y la cultura. Intentamos luchar contra la falsa dicotomía entre cultura y entretenimiento, buscamos que DocsDF sea un espacio de cultura, reflexión, información, de buen cine, y por qué no, de entretenimiento. También tenemos un profundo compromiso con los derechos humanos fundamentales, con los movimientos sociales en cualquier parte del planeta y con el medio ambiente.
I.C.: Un ejemplo es el DocsForum, un encuentro de coproducción iberoamericano en el que participarán proyectos de Argentina, Chile, Colombia, Brasil, Nicaragua, Uruguay. Esta selección de proyectos fue hecha en colaboración con otros foros de coproducción como DocMontevideo, Encuentros Cartagena, DocsBarcelona, sin perder de vista nuestra línea editorial, pero también contemplando las propuestas de realización ligadas al cine documental. Esta selección acompaña también la intención de fortalecer una identidad iberoamericana.
DocsDF es un evento anual en el que conviven tres espacios: el de la exhibición; el de la formación, que es el DocsForum en el cual podemos combinar un seminario -que este año impartirán por un lado Albert Maysles y por otro Lech Kowalski-, los paneles en los que reflexionaremos sobre temas que consideramos importantes como la coproducción con Europa, las nuevas narrativas, nuevas plataformas, los fondos de financiamiento; y el de la coproducción, que en el caso de la octava edición, con el Reto DocsDF contribuir al desarrollo de nuevos proyectos a través de una convocatoria en donde cinco jóvenes cineastas puedan generar una nueva obra.
DocsDf es cada año una plataforma más amplia para el cine documental. ¿Perciben algún riesgo en este crecimiento?
P.M.: La ciudad de México en sí es un riesgo y es una realidad, la expansión es casi forzosa y necesaria. La expansión en términos de público no ha significado ningún riesgo, todo lo contrario. Nos interesa dirigirnos a un público lo más amplio posible, pero también a los realizadores consagrados y a nuevos realizadores, sobre todo a los estudiantes (mediante el Forum, el Reto), a los distribuidores y a los agentes de venta internacional, e incluso a los otros festivales de documentales tanto nacionales como internacionales que se nutren de programación mexicana y latinoamericana en DocsDF. Siempre hemos intentado, partiendo de la base de la exhibición para el público local, dirigirnos a todas estas personas que encuentran un punto de interés concreto en el Festival.
I.C.: Al detectar un profundo interés en torno al cine documental, hemos tomado otras iniciativas más allá del festival de cine documental de la ciudad de México. Queríamos llegar a otros estados de la República Mexicana y compartir la programación con otras sedes y es así como nace la idea de hacer Doctubre. Este programa en 2012 llevó un programa de 6 largometrajes y 5 cortometrajes documentales a 68 ciudades del país en más de 130 sedes entre cineclubes, espacios culturales, universidades públicas y privadas. Este año se sumaron más de 20 sedes en el país. Por otro lado ampliamos la Red Doctubre a Iberoamérica, tenemos Doctubre Mx y Doctubre IB, con sedes en Argentina, Puerto Rico, Cuba y Colombia.
¿Qué papel tiene la Red Doctubre en el festival?
P.M.: Nos gusta mucho el espacio que ocupa Doctubre. DocsDF lo primero que hace es una convocatoria para películas, y una vez que ésta cierra, se abre una convocatoria para sedes. Los requisitos para que un espacio pueda ser sede es que cuenten con una calidad mínima de exhibición, que tenga una pantalla y un buen proyector. Si nosotros diversificamos mucho nuestra programación también nos gusta mucho que las sedes, que la experiencia cinematográfica de ver un documental esté totalmente diversificada, porque si tuviéramos 20 salas comerciales el festival perdería mucha riqueza.
I.C.: Creo que alcanzaremos a ver el impacto de esta red en un tiempo, porque año con año se van sumando más espacios. Aspiramos a que no solo durante el mes de octubre trabajemos con este programa de exhibición, sino a crear una red de colaboración entre las sedes de forma permanente.
Este año el programa es de 5 largometrajes y 5 cortometrajes tanto para México como para Iberoamérica. Los contenidos para cada red son distintos, Doctubre Mx es una sección internacional competitiva del festival, en la cual se compite por un premio brindado por el público en todo el país, durante todo el mes de octubre. Doctubre IB es una selección de documentales iberoamericanos que participaron en años pasados, desde el 2009 al 2012.
¿Cómo ven el panorama del documental iberoamericano en términos de producción y de tendencias en la creación?
I.C.: Desde hace diez años estoy al frente de una casa productora, me preocupaba por los proyectos que podían entrar a la compañía para poder pagar los sueldos y la renta del espacio, tal vez en desarrollar un proyecto personal y buscar como financiarlo, llevarlo a una canal de TV o a un posible patrocinador privado, o aplicar a un fondo público. Ni siquiera me imaginaba hace 10 años que estaríamos realizando este festival que ya cumplió 8 años, y veo con agrado haber encontrando en el camino tantos colaboradores en otros festivales y foros de coproducción para el cine documental.
En todos estos años se han ido tejiendo muchas redes que han despertado muchos intereses, como por ejemplo hace dos años cuando nos contactó la productora ejecutiva de Al Jazeera para participar en el festival; o Luis González Zaffaroni de DocMontevideo, o gente de ITVS, de Sundance, y este año José Rodríguez y Ryan Harrington de Tribeca Film Institute manifiestan su interés, creo que esto no se daría si Iberoamérica no fuera un territorio en el cual se están dando cosas, se están haciendo buenas películas.
P.M.: Por esto también es que estas instancias están volteando la mirada sobre América Latina, porque tanto DocsDF como otros eventos que hay en América Latina, sobre todo en Sudamérica, están ayudando a desencasillar el documental latinoamericano. México no solo es migración y cárcel, Colombia no solo es violencia, Argentina y Chile no solo es represión, dictaduras y desaparecidos, Cuba no sólo es Fidel Castro: el talento latinoamericano está realizando cosas muy buenas, está habiendo éxitos locales de taquilla en toda América Latina.
Al Jazeera, Tribeca Film Institute, ITVS, Sundance, están buscando estos nuevos contenidos. Latinoamérica es un continente extremadamente rico, pero extremadamente encasillado. Es gracias al esfuerzo de los documentalistas y productores, que se está acabando con los mitos e imágenes que se tiene desde fuera. Por eso se están interesando mucho en América Latina. Hay mucho talento, tenemos muy buenos realizadores, son muchas las historias que contar, historias necesarias y urgentes y a diferencia de lo que sucede en Europa que las televisoras están más preocupadas por generar ratings, aquí estamos preocupados por hacer buenas películas.
¿Cómo surge la colaboración DocsDF- Tribeca Film Institute?
I.C.: José Rodriguez -del Tribeca Film Institute-, estaba interesado en ofrecer un taller en México. El año pasado estaba coproduciendo un documental “Viaje al corazón de la frontera”, en el cual había un productor ejecutivo en EU, un realizador de origen cubano, Hugo Pérez, y fue a través de él que comenzamos la relación con José Rodríguez. El TFI tenía la iniciativa de realizar el taller en tres países latinoamericanos y estaban buscando colaboradores, lo hicieron el Chile con SANFIC, en Sao Paulo con la colaboración de TAL TV y en México encontraron que por una serie de factores éramos un buen foro para llevarlo a cabo.