Ocho largos exploran el regreso a la infancia en Málaga WIP Iberoamérica

"'Agua Salá' es la historia de un amor incómodo, de esos difíciles de aceptar. ¿Se puede juzgar a Jacobo por haberse enamorado de un sacerdote acusado de pederastia? Con el mar Caribe de testigo, esta película nos muestra que no todo amor es correcto, pero es amor al fin y al cabo. Creo que hacen falta más relatos en el cine independiente colombiano que aborden conflictos distintos a los de nuestra realidad política y sus estragos en la sociedad; como país también tenemos una deuda histórica con contar más historias desde la diversidad sexual y de género. Por eso, para mí, como guionista y director abiertamente homosexual, prima siempre la pulsión por dar voz a personajes incomprendidos, a esos seres silenciados de mi comunidad que tanta luz y color tienen para aportarle a las grandes pantallas". Steven Morales Pineda, director y guionista.

"La llegada de internet coincidió con mis primeras experiencias sexuales. Hasta ese entonces, la mía era una vida fracturada: por un lado mi deseo por otros hombres y por el otro… todo lo demás. Internet apareció como un espacio infinito lleno de todo, incluso de gente que mostraba que era posible dejar de vivir la vida como algo fragmentado. El tiempo pasó y tengo la impresión de que si bien algunas fracturas sanaron, surgieron otras. Esta película toma como materia prima algunos restos (o cadáveres) dejados por esos quiebres. Revistas, apuntes de educación moral, videos familiares y animaciones permiten construir este collage sobre el deseo que encuentra soporte en mi propia historia". David Valverdi, director, guionista y productor

"Como los personajes de la película no son actores sino personas reales que vivían en el campamento, necesitaba una estrategia para que actuaran de forma natural. Cuando llegamos a Canadá, les dije al crew y a Rex, el coprotagonista, que Daniel se había quedado en Costa Rica, que de ahí en adelante yo sería Damian y que me mantendría en personaje hasta llegar de vuelta a Costa Rica. Esto me dio la posibilidad de crear un escenario donde podía actuar con Rex el conflicto interno de Damian y al mismo tiempo interactuar de forma natural con todo mi entorno, adaptándonos y reaccionando. Vivíamos en secreto dentro de la película". Daniel Ross Miz, director, guionista y productor

"Cuando empecé este documental pensé mucho en la comunidad a la que pertenezco, y pensé mucho en cómo la representación de los inmigrantes chinos en Costa Rica tenía que ir más allá del chop suey, las “r” mal pronunciadas, el chino del supermercado o el mito de que todos comemos carne de rata. Por eso decidí realizar un retrato íntimo, poniéndo la experiencia de mi propia familia y a mí misma en el centro de la historia. Para mí es vital presentar más dimensiones que los estereotipos por los que somos conocidos. Pero esta es también una historia universal, porque trata sobre conectar con un pasado desconocido y encontrar las raíces que le dan forma a nuestra identidad. Esta es una película sobre no olvidar o no permitir olvidar". Nicole Chi, directora.

"Vivo en un lugar donde los hechos más atroces siempre vienen acompañados de una ironía recalcitrante. No sé si es por nuestra geografía, las placas tectónicas o nuestro violento mestizaje. O ninguna de estas razones. Esta película puede ser leída desde un prisma dramático, pero mi visión de este mundo está más cercana a la comedia. Me interesa mucho hacer el cruce entre una actriz profesional y reconocida por sus éxitos televisivos con la gente de su ciudad natal para acentuar aun más el sentido de subordinación, tendiendo a generar mayor realismo y credibilidad, así como un ambiente propicio para el humor".  Bernardo Quesney, director y coguionista

"Nací en el interior del estado de Goiás, donde existe una cultura de transmisión de conocimientos a través de la oralidad. En este ambiente de campo existían otras formas de afrontar el paso del tiempo y el ritmo de vida. En mi familia, el trabajo y las ocupaciones cotidianas eran la tarea principal. Las pocas conversaciones eran sobre asuntos prácticos y estar en silencio no era perturbador ni molesto. Recuerdo especialmente a mi abuela, que enviudó muy joven y se encargó sola de sus dos hijas. Recuerdo su silencio, cierto misterio que fue determinante para establecer las relaciones de convivencia en mi familia. Creo que la película nació de ese aparente desapego; como si hubiera un sujeto que observaba las situaciones, sin comprenderlas muy bien". Adriano Guimarães, director.

"La película tiene sus raíces en una historia personal, cuando mi propia familia se vio inmersa en la paranoia y la psicosis de un posible cataclismo. El llamado “eclipse galáctico” (tres días de oscuridad) nunca llegó y a mi familia no le quedó más que aprender a sonreír cada vez que se nos acercaba alguna de las personas a las que habíamos alertado sobre la entrada de la Tierra a la nueva dimensión. Varios de los detonadores que en su momento afectaron mi núcleo familiar siguen estando vigentes, quizá de forma más marcada y extendida: tensiones de naturaleza tremendista, la dificultad para distinguir entre realidad y espectáculo, crisis económicas y ecológicas de dimensiones obscenas, la soledad en nuestro mundo tan conectado, tan expuesto y tan consumista". Iván Löwenberg, director, guionista y productor.

"'Rinoceronte' es una película sobre la rabia. La rabia de un niño separado de una vida solitaria y violenta que es todo lo que conoce y  la rabia de un asistente social que ve reflejadas sus cicatrices en las del niño. Es en ese encuentro donde Damián tendrá que aceptar, o no, la compañía y la posibilidad de algo nuevo, y Leandro deberá entender que por más que quiera ahorrarle al niño las partes más difíciles del trayecto, lo único que puede hacer es llevarlo hasta la puerta y cruzar los dedos".  Arturo Castro Godoy, director y guionista.