• Cannes 2016: “A febre” y “Río sucio”, proyectos latinoamericanos que se impulsan en La Fábrique

Cannes 2016: “A febre” y “Río sucio”, proyectos latinoamericanos que se impulsan en La Fábrique

La Fábrique des Cinémas du Munde es el programa profesional que busca internacionalizar a los nuevos talentos de los países emergentes, apoyando a directores que desarrollan su primer o segundo largometraje. Organizado por el Institut Français, el espacio ofrece a sus participantes diferentes herramientas para trabajar en sus proyectos, a partir de una visión profesional e internacional. En esta edición, dos proyectos latinoamericanos integran la selección compuesta por diez títulos: “A febre” de la brasileña Maya Da Rin y “Río Sucio” del costarricense Gustavo Fallas.

“A febre” es un proyecto producido por la debutante Da Rin con su compañía Tamanduá Vermelho, en alianza con Leonardo Mecchi de Enquadramento produções, y Juliette Lepoutre y Pierre Menahem de la francesa Still Moving. La historia se desarrolla en Manaos, la capital del estado de Amazonas, a la cual se trasladan un millón de migrantes para trabajar en las fábricas del polo industrial. Precisamente, el protagonista del film es un hombre indígena que trabaja en esta zona como vigilante y vive con su hija enfermera que acaba de ser aprobada para estudiar en la capital; su partida lo enfrenta a la soledad y en pocos días una fiebre se apodera de él, comenzando a sentir que es perseguido por una presencia que no sabe si es humana o animal.

“Lo sueños del personaje principal tienen un papel importante en la historia. Para los indígenas, los sueños no son una manifestación simbólica del inconsciente como nosotros creemos. Son una manifestación de otras realidades y de seres que pertenecen igualmente a nuestro mundo”, explica Da Rin, quien busca trabajar ese aspecto surreal de la historia a través del sonido, “por su capacidad sugestiva para dejar que el espectador pueda crear sus propias imágenes”.

Da Rin inició el proceso de desarrollo del film de una forma muy intuitiva, con un trabajo de investigación de dos años antes de comenzar a buscar espacios que apuntalen el proyecto. En 2014 participó del encuentro de coproducción de CineMundi, recibiendo un premio que le permitió participar en Torino Film Lab. Al año siguiente fue premiado por Hubert Bals Fund y seleccionado para el laboratorio de guión Script&Pitch. También participó de la residencia de Cinéfondation antes de llegar a la La fábrique, donde espera encontrar posibles aliados para su producción, posiblemente de Latinoamérica, que se sume a la coproducción ya establecida entre Brasil y Francia. Con el objetivo de filmar en el segundo semestre de 2017, actualmente busca financiamiento en Brasil y Europa para completar sus 600.000 euros de presupuesto estimado.

“Río Sucio” es el segundo largometraje de Fallas, quien debutó con el film “Puerto Padre”. La historia de este nuevo proyecto nace a partir de una experiencia personal del realizador costarricense, quien conoció a un colono que llevaba una vida solitaria en el medio de la selva y con las dificultades propias del aislamiento y la pobreza. “Había algo irreconciliable de este hombre consigo mismo y su pasado le pesaba más que cualquier dolor: su padre había asesinado a un hombre cuando él era un niño y había ido preso. Su niñez quedó marcada por la ausencia de su padre. Una madrugada me despertó una llamada, este hombre había matado a su vecino. Me impactó mucho el carácter circular de la historia y el viaje inevitable hacia el destino del padre. Durante algún tiempo estuve pensando cómo contar esto, hasta que un día se presentó claramente ante mí la imagen de un niño, pre adolescente, que asiste a la historia como testigo, y pude concretar el relato”, recuerda.

En “Río Sucio”, Fallas narra la historia de un viejo ermitaño que vive encerrado en la montaña odiando al único vecino que tiene. Un día se presenta su hija, a la que hace tiempo no ve, para dejarle a su nieto de 12 años. Abuelo y nieto son dos extraños pero poco a poco, el viejo le enseñará al joven cómo sobrevivir en la montaña, y también éste aprenderá sobre el odio y sus fatales consecuencias.

“Me interesa profundizar en los ‘guiones de vida’ y su representación inconsciente. La ruptura o continuidad de estos guiones y la fatalidad a la que nos conduce el odio”, comenta Fallas, en relación a este proyecto, quien en la historia “refleja elementos profundamente personales; la relación familiar marcada por la propiedad y el deseo de la mirada aprobatoria de un padre ausente”.

El proyecto se encuentra en pleno desarrollo y avanzando en su proceso de casting. Con un presupuesto estimado en casi 400.000 euros, es una producción de la costarricense Centrosur Producciones, en coproducción con la colombiana El Milagro Producciones y la mexicana Monsterfly. En Cannes procura posibles socios interesados en unirse a la producción y distribución de la película.