• Coproducción e innovación: claves para la creación y distribución de contenido infantil

    Imagen de "Puerto Papel" de Zumbástico Studios.

  • Coproducción e innovación: claves para la creación y distribución de contenido infantil

    Imagen de "Momonsters" de Big Bang Box.

  • Coproducción e innovación: claves para la creación y distribución de contenido infantil

    Álvaro Ceppi, José Luis Farias, Cielo Salviolo y Guillermo Velasco Zwickert.

Coproducción e innovación: claves para la creación y distribución de contenido infantil

Animation! Ventana Sur acogió el pasado miércoles una charla sobre la creación y distribución de contenido infantil en Iberoamérica. Organizada por La Liga de la Animación Iberoamericana, Animation!, el Programa Ibermedia y el ICAA (Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales de España), la actividad continuó en la línea de una primera instancia sobre la misma temática desarrollada en el marco de Pixelatl. 

Moderada por José Luis Farias, director de los Premios Quirino, la mesa redonda contó con la participación de Cielo Salviolo, directora de Pakapaka, canal público argentino que lleva 11 años impulsando la animación infantil en América Latina; Álvaro Ceppi, director creativo de Zumbástico Studios (Chile), estudio creador de reconocidas obras como “Puerto Papel” o “Zumbástico Fantástico”; y Guillermo Velasco Zwickert, fundador del estudio de animación y videojuegos español Big Bang Box, creador del contenido multiformato “Momonsters”, entre otros. 

Una de las principales conclusiones del intercambio fue la necesidad de seguir impulsando las coproducciones. Según Salviolo, la coproducción es parte del ADN de Pakapaka: “sin las coproducciones no podríamos encarar los proyectos de animación que tenemos. Ésa es una realidad contrastada”. La directora del canal argentino afirmó que si bien al inicio solo trabajaban con otros canales o instituciones, ahora también coproducen con productoras independientes, y eso “ha sido un avance enorme”, señaló. Consultada por los pasos que podría dar Ibermedia en este sentido, Salviolo sugiere dos: poner en agenda lo infantil sin necesidad de que haya una convocatoria específica; y generar un espacio de articulación de coproducciones, “algo que ya están haciendo muy bien varios festivales y mercados".

Álvaro Ceppi también pone énfasis en el papel que debería jugar Ibermedia en relación a las coproducciones, sobre todo para viabilizar proyectos ambiciosos, y pone como ejemplo “Puerto Papel”, serie coproducida con canales y empresas de Argentina, Brasil, Colombia y Chile, que recibió múltiples premios y fue vendida internacionalmente: “La clave fue la capacidad de unirnos para un proyecto que era muy ambicioso. Uno toma conciencia de que sin la capacidad de articularnos es muy difícil abordar proyectos con ciertas características”.

Velasco, por su parte, también destaca la coproducción como camino y la define como “fundamental” para ampliar las visiones y enriquecer los proyectos. En esta línea, comenta que están desarrollando su próximo trabajo en coproducción con un estudio peruano. Con respecto a Ibermedia, el director de Big Bang Box hace un reclamo diferente al de sus colegas y es que el programa “está muy enfocado en cine y no tanto en televisión. Hay que entender que la animación de televisión no es menor que la de cine, y sin ella no habría industria”. 

Otro de los temas que surgieron en la charla es la importancia de la innovación, y no sólo tecnológica, sino la importancia de la innovación en su sentido más amplio: formas narrativas, formatos, historias, modelos de negocios, etc. La gerenta de Pakapaka afirmó que, en este momento, al canal le está costando encontrar contenidos innovadores, y no duda en señalar que la causa es el debilitamiento de la industria. “Venimos de situaciones económicas muy difíciles en los últimos años, eso implica que las productoras están produciendo contenidos que saben que funcionan, no van a innovar. Por otro lado, algunas han cerrado y las nuevas que entran al mercado no se insertan desde el inicio en la producción infantil”, sostiene. 

El productor de “Puerto Papel”, por su parte, propone la innovación como un camino para explorar la identidad de la animación de la región. “Hay una serie de elementos que tenemos como región, como las historias o los lenguajes propios, que todavía faltan por desarrollar; y creo que hay un código que todavía podemos llevar al mercado internacional”, señala. El productor chileno reflexiona además sobre la importancia de desarrollar un estilo propio: “En la medida que el circuito iberoamericano se ha ido conectado con la industria anglosajona, se ha ido adaptando a sus formatos y estilos de contenidos, y desde mi perspectiva eso es un gran error. Si nos empezamos a amalgamar, esos proyectos similares van a ser dejados de lado por los auténticos de la industria anglosajona que ya están realizados con mayor presupuesto y con características y conexiones de industria”, sostiene.

Es importante que Ibermedia ponga en agenda lo infantil sin necesidad de que haya una convocatoria específica.

¿Qué es un contenido infantil?

Lo que a priori puede parecer una pregunta obvia muestra las complejidades de un sector que involucra a buena parte de la ciudadanía y el mercado. Según Salviolo, un contenido infantil debe ser “apropiado, pertinente, relevante y atractivo” para las audiencias infantiles, las cuales se pueden dividir en tres públicos objetivos: 2 a 5 años, 6 a 9 años y 10 a 12 años. De hecho, la definición del público objetivo o target es uno de los grandes desafíos para quien incursiona en la producción de obras para público infantil. Según explica Velasco, hay mucha divergencia a la hora de identificarlos e incluso hay diferencias de criterio entre los propios canales, pero destaca la libertad creativa: “es un sector muy complejo, porque no se puede testear un producto con público infantil, pero por otro lado, eso nos da una frescura total, a los niños puedes contarles las historias de una forma absolutamente abierta, con animales, con estrellas o con magia, lo aceptan todo con una frescura bestial, algo que con los adultos no se puede hacer”. En esa misma línea, Ceppi afirma que “los contenidos más autorales tocan los márgenes de los targets, y cada vez los límites se amplían, se está abriendo la posibilidad de hacer cosas no tan encasilladas como era la realización audiovisual hace 25 años atrás”. 

Por otro lado, la gerenta de Pakapaka destacó que el contenido infantil “puede tener muchos formatos o narrativas; puede ser audiovisual o digital. Puede ser animación, pero también documental o ficción con actores” y agregó que una de las principales preocupaciones del canal en este momento es la incapacidad de responder al volumen de contenido que demanda el mercado. “Con los presupuestos que manejamos, hoy nos está llevando unos 10 meses hacer una serie de animación (10x10’). En esa mixtura que hay hoy, podemos producir diversidad de formatos, tenemos series con capítulos de 5, 7, 11 ó 15 minutos, pero nos cuesta generar cantidad. Nosotros distribuimos nuestro contenido, pero no logramos generar el volumen que el mercado pide. Es lo que nos pasa a todos en América Latina”.