El cine de Costa Rica resultó el gran vencedor de la 16°edición del Festival Ícaro, en el cual la opera prima del costarricense Neto Villalobos, “Por las plumas”, se llevó el premio principal de mejor película de ficción centroamericana.
Además del premio central, “Por las plumas” consiguió el galardón de mejor director; ampliándose la supremacía “tica” con los dos premios para “Puerto padre” de Gustavo Fallas (mejor actriz para Adriana Alvarez y mejor edición para Alberto Amieva), y otros dos para “Princesas rojas” de Laura Astorga (mejor guión para Astorga-Daniela Goggi y mejor dirección de arte para Gabrio Zapelli).
La hondureña “El Xendra” de Juan Carlos Fanconi fue premiada como mejor producción; en tanto que la panameña “Ruta de la luna” de Juan Sebastián Jácome fue distinguida en las categorías de mejor actor (Luis Antonio Gotti), sonido (Estebanoise Brauer) y fotografía (Magela Crosignani).
El resto de premios en la sección centroamericana fueron los de largometraje documental para el guatemalteco “Justicia para mi hermana” de Kimberly Bautista, corto de ficción para el costarricense “Irene” de Alexandra Latishev, corto documental para el nicaragüense “Lih Wina” de Dania Torres Hurtado, corto de animación para el salvadoreño “Entia-Portadores de vida” de Virgilio Abraham Cortez Recinos, y corto experimental para “Estaba sufriendo” de Rodolfo Javier Neyra.
En la categoría internacional, el mejor largometraje de ficción fue el español “El cosmonauta” de Nicolás Alcalá, mientras en documental fue el chileno “Leontina” de Boris Peters. El brasileño “Hooji” de Marcello Quintella e Boynard fue elegido el mejor corto de ficción, y el cubano “Escenas previas” de Alexandra Maciuszek el mejor corto documental. Como experimental se seleccionó al mexicano “Fantome” de Juan Manuel Erazo, y como corto de animación al también mexicano “Lluvia en los ojos” de Rita Basulto.
La debutante sección Haciendo Industria también concedió sus premios entre los seis participantes del Work in Progress Centro América Concluye. El premio Central Post de posproducción integral fue para el nicaragüense “La pantalla desnuda” de Florence Jaugey; en tanto que Assimilate concedió una licencia scratch al costarricense “Dos aguas” de Patricia Velásquez.
Más allá de los premios y el estímulo que representan, esta edición estuvo marcada por la fuerte apuesta por la formación y el fomento -a través del Campus, Haciendo Industria, los talleres y las charlas-, por la evidente evolución del cine centroamericano pese a la falta de apoyos, y por la manifiesta voluntad y necesidad de pensar en un cine regional.
En la ceremonia de clausura desarrollada en la fascinante Antigua Guatemala, quedó la promesa pública desde el área de cultura del gobierno de Guatemala de profundizar su apoyo al festival, a fin de convertir a Ícaro en el espacio de encuentro y la plataforma de difusión del cine centroamericano. Una iniciativa por demás celebrada y requerida.
Desde Guatemala, por Cynthia García Calvo.