FICValdivia2017: “Baronesa” y “Tierra sola” reciben los principales Pudús

Festivales - Chile

El sábado 14 de octubre se dio a conocer el palmarés de la vigésimo cuarta edición del Festival Internacional de Cine de Valdivia. Un homenaje a Víctor Jara dio inicio a la ceremonia de premiación, que con la conducción del director del festival, Raúl Camargo, y la actriz Blanca Lewin, se celebró en el Aula Magna de la Universidad Austral de Chile, la sala principal del certamen.

En la Competencia Largometraje Internacional, integrada por doce filmes, el jurado entregó los máximos Pudús a filmes latinoamericanos. La brasileña “Baronesa” de Juliana Antunes se alzó con el reconocimiento a Mejor Película, dotado con un estímulo de 4 mil dólares; mientras que la chileno-mexicana “Casa Roshell” de Camila José Donoso recibió el Premio Especial del Jurado. Por su parte, el Premio del Público de la categoría fue para a la película portuguesa “A fábrica de nada” de Pedro Pinho. El comité de jurado, integrado por Kiro Russo, Ela Bittencourt y Jerónimo Rodríguez, decidió entregar dos menciones especiales a la francesa “Braguino” de Clement Cogitore y la ópera prima en largo del georgiano Alexandre Koveridze, “Let The Summer Never Come Again”.

La Competencia Chilena premió dos documentales de directoras mujeres que reflexionan en torno a dos zonas del territorio austral poco recogidas en la filmografía chilena. El Pudú a Mejor Película, dotado con 3 millones de pesos, fue para “Tierra sola”, obra de Tiziana Panizza que con extenso trabajo de material de archivo acerca un retrato del pueblo rapa nui. El jurado, conformado por Gerwin Tamsma, Emilie Bujès y Magdalena Arau, entregó el Premio Especial a “Desierto no cierto”, filme de Nathaly Cano que relata el cotidiano de dos mujeres mayores en Atacama.

Por su parte, en la flamante sección Cine Chileno del Futuro, en la que se mostraban seis producciones nacionales en fase de finalización, el premio fue para “Nona. Si me mojan, yo los quemo” con dirección de Camila José Donoso y producción de Rocío Romero (Mimbre Producciones). El galardón de esta iniciativa, coorganizada por el certamen en alianza con CinemaChile y la Film Commission de Chile, consiste en mil dólares y la participación de la productora en la próxima edición del Rotterdam Lab de Cinemart.

En la categoría de corto latinoamericano, el jurado integrado por Agnes Wildenstein, Carlos Piñeiro y Aaron Cutler decidió otorgar un Premio Especial al argentino “Niebla” de Flavia de la Fuente y reconoció al colombiano “Palenque” de Sebastián Pinzón como el Pudú a Mejor Corto, premio dotado con mil dólares en efectivo. “Here’s the plan”, corto de animación de la directora chilena Fernanda Frick, recibió el Pudú FICVin, categoría dedicada a la formación de audiencias con una selección de cortos infantiles y juveniles. El jurado estuvo integrado por el público infantil que asistió a las funciones.

El certamen decidió otorgar dos premios a la trayectoria. El prolífico y aclamado director japonés Sion Sono, cineasta invitado de esta edición, fue reconocido con el Premio Especial a la Trayectoria; mientras que Joan Jara, la presidenta de la Fundación Víctor Jara, recibió un Pudú especial como homenaje a su labor de preservación y difusión de la obra del cantautor chileno. Asimismo, durante la ceremonia, el Centro Cultural de Promoción Cinematográfica de Valdivia (CPCV) y la mencionada fundación firmaron un convenio de colaboración.

Según informaciones de la organización, el festival reunió a cerca de 40 mil personas en las diferentes sedes del certamen. En declaraciones a LatAm cinema, Raúl Camargo se mostraba feliz ante una edición que califica “de lujo”. “Es una sensación encontrada, porque uno trabaja durante más de un año para preparar cada versión, y uno no quiere que se termine. La gente nos ha acompañado de manera masiva, se ha generado ese vínculo cariñoso que es propio del sur de Chile, y solo queda agradecer al equipo y a la comunidad que nos acompaña para hacer de esta fiesta algo tan bueno”, señaló.

El equipo del festival comienza ya a trabajar en sus edición de plata, que se celebrará del 8 al 14 de octubre de 2018. “Tenemos que manejar un equilibrio que nos permita hacer un gran festival sin caer en lo autocelebratorio, porque podría llegar a ser una tentación que cuando uno se autofelicita termina quizás haciendo cosas que no tienen que ver con el espíritu de las cosas en sí. Por ende, tenemos un año para trabajar pero si esperamos sorprender, ahora, la vara está muy alta”, concluyó Camargo.