Río Negro Proyecta: El jurado oficial de largometrajes deliberó a puertas abiertas

Festivales - Argentina

Desde Bariloche, por Cynthia García Calvo Toda una innovación implementó Río Negro Proyecta, en una acción que tal vez sea imitada por otros certámenes en el futuro inmediato. Por sugerencia del crítico Eduardo Antín, Quintín, la deliberación del jurado oficial de largometrajes fue pública, permitiendo a los propios directores o representantes de las cintas en competencia ser oyentes de las diferentes argumentaciones que esgrimían los miembros del jurado para definir el ganador de esta edición. Sin embargo, el suspenso sobre el vencedor se decidió mantener hasta la clausura aunque se sabe que se definirá entre la ficción cordobesa “De caravana”, de Rosendo Ruiz, y el documental “La peli de Batato”, de Goyo Anchou y Peter Pank.

Un evento sumamente convocante resultó esta prueba piloto con una dinámica muy sencilla. Los tres integrantes del jurado –Quintín, el realizador José Campusano y el crítico Juan Manuel Domínguez- cada uno a su turno opinaba, reflexionaba y manifestaba sus objeciones y afecciones sobre una película, tras lo cual –como si de American Idol se tratara- emitía su voto sobre si la cinta merecía seguir en consideración y pasar a la lista corta de elegibles para el gran premio.

Esta deliberación fue seguida por un público que sólo se limitaba a escuchar, sin opción a intervenir en una cuestión que siempre se define a puertas cerradas.

Roger Alan Koza, programador y director artístico del festival junto a Pablo Mazzola, explicó que esta iniciativa responde a uno de los objetivos del certamen, que es que sea un “lugar de aprendizaje, de conocimiento”. La idea de esto es “que una deliberación no se transforme en un acto de entretenimiento morboso sino en una posibilidad de entender las argumentaciones con que se eligen las películas, y por lo tanto transformar ese momento en un acto de conocimiento público”.

Luego de argumentar cada jurado sobre las diez películas, la mitad pasaron a una segunda instancia: “De caravana”, “La peli de Batato”; “El estudiante”, de Santiago Mitre; “Noche sin fortuna”, de Francisco Forbes y Alvaro Cifuentes, y “Hachazos”, de Andrés Di Tella. Dado que las tres primeras fueron elegidas por unanimidad, quedaron en una suerte de final para luego ceñirse a los dos títulos entre los que se definirá el premio de la Competencia Nacional de Largometrajes dotado con 30.000 pesos otorgados por la Subsecretaría de Cultura de Río Negro.

Sobre “De caravana”, la historia de un fotógrafo que tras un concierto popular termina involucrándose con una mujer de otro estrato social e insertado en un mundo desconocido para él, sostuvo Campusano que es una película “con infinidad de méritos”, destacando que es genuina al confiar “en el entorno, en los estratos, en los modos, en la ciudad”. Para Domínguez “tiene una energía” que la particulariza dentro del cine argentino, coincidiendo Quintín que es novedosa dentro de la producción nacional: “Estamos en una cinematografía un poco depresiva en general, y esta es una película muy arriba, muy alta, en un tono que es raro en el cine argentino”.

En cuanto a “La peli de Batato”, retrato de ese icono que es Batato Barea, para Campusano “el documental es bastante amplio pero tiene una repetición en cuanto a la información”. Domínguez subrayó que es una película que “está completamente enamorada de lo que cuenta” y justifica todo exceso sobre el personaje. “Todos coincidimos en que si fuese más corta se beneficiaría y está la reiteración pero tiene que ver con ese grado de sentido del homenaje”, dijo Quintín, calificando al film como “una sorpresa”.