El cine chileno se quedó con los principales premios de la decimoquinta edición del Festival Latino de Los Angeles-LALIFF, que cerró sus puertas el pasado 25 de julio en el Egyptian Theater. “Post Mortem”, de Pablo Larraín, se alzó con el premio a la mejor película, mientras que Matías Bize, director de “La vida de los peces”, obtuvo el galardón al mejor director.
Por su parte, la colombiana "Los colores de la montaña”, de Carlos César Arbelaez, recibió los premios a la mejor opera prima y al mejor guión, la venezolana “La hora cero”, de Diego Velasco, el premio del público, y “Nostalgia de la luz”, del realizador chileno Patricio Guzmán, el de mejor documental.
El festival, que exhibió más de 70 filmes de 14 países, incluyó en su programación dos estrenos mundiales y seis estrenos en Estados Unidos.